En un océano de entre 200 y 245 millones de compañías en todo el mundo, según el Banco Mundial, “la clave para invertir no es evaluar cuánto afectará una industria a la sociedad o cuánto crecerá, sino determinar la ventaja competitiva de cualquier empresa y, sobre todo, la durabilidad de esa ventaja”.
Esta frase de Warren Buffett, presidente y director ejecutivo de la gestora Berkshire Hathaway, recoge una de las cinco principales cualidades que debe tener un negocio de calidad para ser considerado como una buena inversión.Por supuesto, teniendo en cuenta barreras de entrada, crecimiento estructural, generación de caja y rentabilidad elevada sobre capital.